3 de Diciembre: Día Internacional de las Personas con Discapacidad

La mayoría de nosotros, los piratas, tenemos algún tipo de discapacidad: a unos nos falta una pierna y tenemos que arreglárnosla con una de palo en la pista de hielo o ensayando el acrosport; otros perdimos una mano en un abordaje y llevamos garfio, lo que dificulta mucho jugar con la Wii pero ¡no necesitamos abrelatas!; otros nos clavamos el catalejo cotilleando en internet un día de tormenta y ahora llevamos parche; y algunos somos cojos, mancos, tuertos... ¿Discapacitados?

Sí, debemos serlo.

A los discapacitados muchos los miran con ojos curiosos, otros con afecto, pero muchos... Muchos los menosprecian o los compadecen ¿Por qué?

El ser humano cree de sí mismo que es el mejor pues se considera el único con la extraordinaria capacidad de pensar. Sin embargo, es también un bicho bien extraño, pues en realidad y a pesar de tanto engreimiento, pensar pensar, piensa poco:

1. Se acostumbra a lo que conoce y se convence de que eso es lo "normal"
2. Le asusta lo desconocido y lo califica de "diferente"
3. Y lo "diferente" lo menosprecia, así, sin pensarlo mucho.

¿Pero que es lo normal y que es lo raro? ¿Sólo hay una manera de ser aceptable? ¿La de quién?

¿Que no te guste el fútbol o que te apasione? ¿Que tengas siempre la mejor sonrisa en el rostro o que no oigas demasiado bien? ¿Que tus pies no paren de zapatear en clase o que vayas en silla de ruedas? ¿Que seas un as en matemáticas o que suspendas ésa y tres más? Todos tenemos cualidades y capacidades distintas ¿Quién es normal? ¿Qué es lo raro?

Todos tenemos alguna discapacidad; sin embargo, a algunos la vida se les hace más difícil.
Todos tenemos capacidades y derecho a que la sociedad nos ponga los medios para desarrollarlas, pero no es así para todo el mundo.

¿Alguna vez has pensado lo que verdaderamente hace difícil la vida? Lee atentamente:

“No es la discapacidad lo que hace difícil la vida, sino los pensamientos y acciones de los demás”

Pensamos que algunas personas no son capaces de realizar muchas actividades, que necesitan ayuda para todo, pero no es así.

Parémonos a pensar en el mundo que construimos, un mundo que en demasiadas ocasiones no está al alcance de muchas personas, un mundo que debemos y podemos cambiar para sea más fácil y accesible para todos. Sin excluidos. Una rampa de acceso o una sonrisa, un teléfono adaptado o un gesto solidario. Está en nuestras manos.

Por último compartir con vosotros el trabajo de un marinero, uno diferente y raro, de esos viejísimos que estudian por las tardes en nuestro océano lo del esquí. Nos lo han enviado en una botella a la cuenta de piratasdeguanteblanco.piratas@gmail.com. El marinero se llama Lucas Sáez y está cursando 3º de Técnico Deportivo en las Enseñanzas Especiales de Deportes de Invierno. Ha producido y dirigido el documental "La búsqueda de la normalidad extraordinaria", expedición: tour al Montblanc de personas con discapacidad intelectual desde su empresa Almontgrave.